¿Qué le parece la fórmula Rodrigo Ávila-Joaquín Villalobos?

Tras leer la encuesta de La Prensa Gráfica del martes 30 me di cuenta de que a la gente no le importa si el FMLN es come niños, vuela puentes, comunista, amigo de Chávez y de Castro, mata vacas, vende misiles, mentirosos o una opción real y viable de cambio.
Me di cuenta de que a la gente que va a votar por el Frente lo que le importa es el candidato, Mauricio Funes. Un candidato que ha demostrado tener una coraza de teflón que, le avienten de donde le avienten, todo o casi todo le resbala.
Y me percaté una vez más de que la gente —sobre todo la clase media— está muy resentida con ARENA y que tiene ganas, pero muchas ganas, de cobrárselas en marzo próximo. Y tal vez en enero también.
Los areneros, aunque lo parezcan, tampoco es que estén de brazos cruzados. El problema de ellos es que en la casa de campaña de Rodrigo Ávila no se están escuchando suficientes voces que guíen al novel candidato presidencial.
Desde el Ejecutivo se está haciendo algo por ayudar al candidato, lo cual es totalmente normal, pero no parece ser suficiente.
La alegría por el TPS fue fugaz y más que todo para los que no vendrán a votar, porque por la fuerza de la costumbre los parientes de los hermanos lejanos ya lo dan como un hecho automático. Aunque no sea ese el caso.
La más reciente jugada en la partida política ha sido el Presupuesto General de la Nación que viene más cargado que Santa Claus, con regalos a diestra y a siniestra (sí, a la izquierda también) para que nadie pueda quejarse. No le quedará otra al FMLN que aceptar que es un plan de gastos mucho mejor que antes y que cumple todas las exigencias que siempre han tenido.
Hace falta ver si tiene el efecto deseado.
Pero como hace falta algo más “tangible” dentro de la campaña arenera para hacerse sentir en la población, y como la gran duda no contestada es si realmente Rodrigo Ávila hará un cambio, sugiero los siguientes movimientos, aunque de antemano sepa que los pericones que le hablan al oído al candidato arenero le dirán que todo esto es una tontería:

1- Que el candidato a la vicepresidencia sea Joaquín Villalobos. Así atraerá a cierto votante de izquierda y dejará perplejo a muchos indecisos.
2- Que cambie a su equipo de campaña y se quede nada más con René León
3- Que comience a presentar a su gabinete de gobierno.
4- Que el ministro de Educación sea Joaquín Samayoa.
5- El ministro de Defensa que sea mujer... y civil.
6- Ministro de Economía Arturo Zablah o Roberto Rubio.
7- Y que diga que el "ministerio social" se lo encargará a una triada compuesta por alguien del FMLN, otro del PDC y otro de ARENA. El PCN no, por favor. Tampoco.

Aparte, le podría ayudar el envío de mensajes a los consumidores de que va a tratar con mano de hierro a la banca y a sus constantes abusos; que no permitirá que las telefónicas impongan su dictadura, y que constituya una empresa de economía mixta entre Ejecutivo y alcaldías areneras para hacerle competencia a Alba Petróleos.
De otra manera la tarea de sobrepasar a Funes será cuesta arriba.
Demasiado riesgo como para esperar que la empresa privada meta miedo y aumente salarios a los empleados (palo y zanahoria) y que el presidente Saca se saque algún as bajo la manga para enero, cuando el dinero del aguinaldo se haya terminado y la apaleada clase media comience a refunfuñar de nuevo.
Porque la clase media será crucial en las elecciones. El voto rural ya no le basta a ARENA para ganar.